La seguridad en Tamaulipas se ha deteriorado considerablemente, lo que representa un grave riesgo para los ciudadanos estadounidenses.
La Embajada de Estados Unidos en México ha emitido una fuerte advertencia: no viajen a Tamaulipas debido a la alta incidencia de delitos violentos, incluyendo secuestros.
Los raptos en las carreteras del estado son cada vez más comunes; los grupos criminales atacan autobuses públicos y privados.
También vehículos particulares, secuestrando a sus ocupantes y exigiendo elevados rescates a sus familias; la carretera Reynosa-Matamoros es especialmente peligrosa en este sentido.
Incluso, los trabajadores estadounidenses que residen en Tamaulipas no están a salvo; numerosos casos de raptos y extorsiones han sido reportados, poniendo en riesgo la vida y la integridad física de estos ciudadanos.
Viajes restringidos:
Las autoridades estadounidenses recomiendan enfáticamente evitar cualquier viaje a Tamaulipas; se han restringido los viajes oficiales del Gobierno estadounidense a áreas específicas con medidas de seguridad extremas y se ha prohibido el desplazamiento por carretera dentro del estado, salvo en casos excepcionales con autorización previa.