En el estado, el 33.8 por ciento de las mujeres embarazadas son jóvenes menores de 20 años, lo que equivale a tres de cada 10: de este grupo, solo el 28 por ciento completa su embarazo con éxito.
Los estudios revelan que el embarazo en adolescentes impacta negativamente en varias áreas, incluyendo la educación, bienestar emocional, entorno familiar, social y pone en riesgo su salud de manera significativa.
Las autoridades han señalado que el mayor número de embarazos adolescentes, en el rango de 10 a 19 años, se concentra en Reynosa, seguido por Matamoros, Nuevo Laredo y Río Bravo.
El contexto para las madres adolescentes suele ser desafiante; muchas enfrentan la maternidad sin el apoyo de su pareja, convirtiéndose en madres solteras, mientras que otras se ven presionadas a formalizar una relación con el padre de su hijo, ya sea legalmente o en unión libre.
Predomina unión libre:
Los datos muestran que el 67 por ciento de las niñas de 10 a 14 años se encuentran en unión libre, el 30 por ciento están solteras y el 3 por ciento están casadas.
Según UNICEF, México lidera el índice de embarazos adolescentes entre los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).