Ante la probable disminución de 2 mil millones de pesos al campo mexicano, dentro del presupuesto del 2026, el presidente estatal de la Confederación Nacional Campesina -CNC- Raúl García Vallejo, advirtió que México podría enfrentar una crisis agroalimentaria, derivado de la soberbia, las pobres
respuestas y la cerrazón del gobierno federal por destinas más recursos a quienes producen
los alimentos en el país.
Refirió que las manifestaciones que hoy recorren todo el país no son casualidad; son el grito de auxilio de miles de productores que ya no pueden más con los bajos precios del maíz, arroz, frijol, trigo, sorgo, oleaginosas y muchos otros cultivos que atraviesan un momento crítico.
García Vallejo sostuvo que la crisis del campo hoy tiene una clara causa: siete años de recortes, desmantelamiento institucional y oídos sordos han llevado al productor mexicano al límite.
“No se trata de una crisis natural ni de un mal ciclo agrícola, es la consecuencia directa de haber abandonado a quienes producen
los alimentos de México”, enfatizó el líder agrario.
Subrayó que el presupuesto de egresos del próximo año debe reflejar una reasignación
real y suficiente para el campo, a la altura de la urgencia que vive la producción alimentaria.
“Porque con los discursos
no se siembra ni se cosecha: el campo necesita recursos, no promesas”, reiteró García Vallejo.
Y añadió que, hoy, una vez más -y como lo hemos advertido desde
siempre-, el campo exige una política agropecuaria seria, que signifique certidumbre y justicia para el productor, pero durante siete años se le ha abandonado.
Expuso que el campo exige y necesita: apoyos a la comercialización, que lleguen a todos los
productores, no solo a unos cuantos, para dar
certidumbre frente a la caída de precios y la volatilidad del
mercado; además la reinstalación del seguro catastrófico, que proteja las cosechas
y el patrimonio de las familias rurales ante sequías, heladas o desastres naturales; y, restablecer el financiamiento al campo, con tasas accesibles y mecanismos ágiles que impulsen la productividad y la inversión rural.






