El líder sindical del magisterio tamaulipeco, Arnulfo Rodríguez Treviño, respaldó la iniciativa presentada este miércoles
por la diputada Blanca Anzaldúa Nájera para proteger a los docentes de agresiones, difamación o extorsión.
La iniciativa presentada por la diputada local y maestra normalista, reformaría artículos de la Constitución de Tamaulipas, el Código Penal y la Ley de Educación del Estado a fin de tipificar este tipo de conductas en perjuicio de los docentes.
«Yo creo que ahorita que la paz, nosotros como la necesitamos para seguir trabajando tranquilos en las comunidades y regresar porque muchos compañeros se han ido con Dios, muchos motivos, yo creo que para nosotros es un orgullo que haya hecho esto nuestra Cámara de Diputados», expresó el secretario general de la sección 30 del SNTE.
El objetivo de la iniciativa de Anzaldúa Nájera, es proteger la integridad física, psicológica y moral del personal docente en Tamaulipas, mediante reformas constitucionales y penales que garanticen su seguridad frente a actos de violencia, amenazas o difamación.
Y es que según precisó Rodríguez Treviño, la primera escuela está en la casa y el mejor aliado del magisterio antes era el padre de familia, y hoy los docentes tienen que hablar con ellos porque los jóvenes pasan sólo ocho horas en la escuela y el resto del tiempo en la casa, donde aprenden valores.
«Hemos cumplido con ellos y a veces marcamos una norma disciplinaria que nos compete y están esperando que llegue el profe a pincharle una llanta o a ponerle una nota en el periódico, y nosotros lo que queremos es una formación cívica», dijo.
Dijo que los alumnos son tan inteligentes que saben lo que está pasando en la sociedad, lo que no sucede en la escuela, y el maestro al querer aplicar disciplina se ofenden los jóvenes.
«Yo me acuerdo de mis maestros, me daban una tundra en la primaria y llegaba yo a la casa y mi papá me daba la cuarta, por qué, porque papá valoraba mucho al maestro como otros padres de familia, hace tiempo que se ha perdido eso», dijo.
La propuesta establece que el Estado deberá
garantizar mecanismos de defensa legal eficaces y oportunos para maestras, maestros y personal de apoyo educativo, así como medidas de prevención, atención y protección en caso de agresiones derivadas del ejercicio de su labor.
En el ámbito penal, se plantea aumentar hasta en una mitad las penas mínimas y máximas para delitos como lesiones, amenazas, privación ilegal de la libertad, extorsión o difamación cuando sean cometidos contra docentes o personal escolar durante el desempeño de sus
funciones.
“Esta reforma busca poner un alto al acoso, la violencia y las agresiones que en los últimos años han afectado al magisterio, muchas de ellas provenientes de padres de familia, alumnos, incluso autoridades escolares. Los maestros enfrentan cada vez más riesgos en su trabajo. Debemos protegerlos, no sólo con discursos, sino con leyes que se cumplan», expresó el líder del SNTE en Tamaulipas.






