La educación no es una prioridad en el gasto público del gobierno mexicano pues los recursos que se destinarán para ese rubro en el 2026 es apenas la mitad del 8 % del PIB que debe destinar el Estado para garantizar el acceso a este derecho según la Ley General de Educación.
Además, advirtió Julianna Garza, secretaria general del PRI y maestra normalista, se perfilan recortes a la educación media y superior, como UNAM, IPN , UAM y universidades estatales, justo cuando se requiere potenciar la preparación de más profesionistas que demanda el Plan México.
En ese sentido, lanzó un llamado urgente al gobierno federal para reconsiderar los recortes presupuestales en materia educativa, señalando que la inversión en infraestructura ha sido mermada mientras se privilegian los apoyos asistenciales como las becas.
Calificó como alarmante el rezago educativo, especialmente en disciplinas clave como el español y matemáticas, y denunció que las condiciones físicas de los planteles educativos son precarias, con techos dañados, goteras y falta de materiales básicos.
“Las becas son indispensables, pero no pueden sustituir un aula segura, un pizarrón, o un espacio digno para que nuestros niños aprendan”, precisó la priista.
Dijo que desde su experiencia como docente y madre, muchos maestros tienen que invertir de su propio salario para cubrir necesidades básicas de sus alumnos.
También criticó que el presupuesto educativo, aunque aparentemente incrementado, presenta reasignaciones que afectan a instituciones clave como el IPN, la UNAM, la UAM, el CONALEP y el INEA.
“Esto no es un tema de colores partidistas, es una realidad que vivimos y que nos duele”, afirmó.
Destacó que la educación superior alcanzará su nivel más bajo de financiamiento del siglo, con una reducción real de 40% desde 2015.






